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Ana Minieri Psicóloga clínica y psicoterapeuta en Barcelona

”Más de treinta años de experiencia en asistencia y tratamientos psicológicos en Barcelona.”

Soy Ana Minieri, licenciada en Psicología y especialista en Psicología Clínica. Realizo supervisiones psicológicas grupales para psicólogos y profesionales de la salud mental en Barcelona.

En ocasiones, un equipo interdisciplinar de un servicio, público o privado, de asistencia psicológica desea mejorar la calidad asistencial del trabajo del equipo. O bien, varios colegas deciden supervisar conjuntamente para optimizar su práctica clínica y aumentar sus conocimientos. En estos casos se establecen unos turnos de presentación de material clínico, y se lleva a cabo la tarea de reflexionar, sobre el material presentado, por todos los miembros del grupo de supervisión con el supervisor. De tal modo, que todos los miembros pueden aprender a partir de la reflexión que hacen sus compañeros y supervisor sobre su propio caso, así como sobre el material clínico que presentan los otros miembros.

La supervisión psicológica grupal también requiere un marco de trabajo que concreta la frecuencia y duración de las sesiones de supervisión. Puede llevarse a cabo la supervisión con una frecuencia semanal, quincenal o mensual. Y la duración de las sesiones de supervisión pueden ser de una hora y media, dos horas o tres horas.

La supervisión psicológica grupal es eminentemente práctica, pero también incluye material teórico en mayor o menor proporción en función de los intereses de los supervisandos

Sobre la Supervisión Psicológica

Todo trabajo que implique la relación directa con personas, supone el riesgo de que aparezcan tensiones, malentendidos, fallos en la comunicación interpersonal, conflictos, etcétera. En el caso de los profesionales de la salud mental, ese riesgo aumenta por varios motivos de los que sólo destacaré dos:

  • En relación con el hecho de que los usuarios o pacientes de centros públicos o privados de asistencia mental, son personas vulnerables puesto que sufren, y además tienen, un mayor o menor grado de, conciencia de este sufrimiento, por lo que requieren un trato preciso, delicado y especializado por parte de los profesionales de la salud mental.
  • A los profesionales de la asistencia en salud mental se les presupone unas mínimas condiciones de salud mental, que les hace aptos para realizar su trabajo asistencial. Por tanto, forma parte de su responsabilidad tratar de mantener, cuidar y preservar estas buenas condiciones personales, en beneficio propio y el de los usuarios.

El trabajo de supervisión clínica se hace necesario, a partir del momento en que el profesional duda de la calidad de su trabajo asistencial, se siente inseguro, le genera ansiedad, siente que el trabajo le sobrepasa y le desborda. Asimismo, también es adecuada la supervisión clínica cuando el objetivo es mejorar el aprendizaje y los conocimientos sobre la dimensión psicológica de la práctica asistencial, y de la psicoterapia relacional.

El trabajo de supervisión clínica supone la revisión y volver a pensar sobre la relación con un determinado paciente o con varios, conjuntamente con el supervisor, el cual aporta una nueva perspectiva de reflexión no solo sobre los pacientes, sino también sobre las características de la interacción establecida entre los pacientes con el supervisando. Podríamos decir que el trabajo con el supervisor tiene el efecto de descongestionar el panorama mental del supervisando en su relación con los pacientes y su trabajo en general.